Sistema reproductor de los reptiles

Sistema reproductor de los reptiles ppt
La reproducción en los reptiles es muy diferente a la de los perros y gatos, y la fisiología y el diagnóstico de las enfermedades reproductivas en los reptiles son complejos. Además de la capacidad de algunas especies para poner huevos, el tamaño y la dieta son factores primordiales que pueden influir en la madurez sexual de los reptiles (Mader, 2006). Dado que la mayoría de los reptiles no tienen dimorfismo sexual, la identificación del sexo del paciente es fundamental, pero puede resultar difícil en los pacientes reptiles. En las serpientes, los machos suelen tener la cola más larga; sin embargo, el sexo puede confirmarse mediante una técnica conocida como "sondaje", que consiste en introducir una sonda metálica en la cloaca y dirigirla hacia la cola. En los lagartos, los machos suelen tener poros femorales más evidentes y protuberancias hemipeniles en la base de la cola. En los quelonios, los machos suelen tener una cola más larga, la cloaca es más distal y el plastrón suele ser cóncavo. Pueden darse variaciones sexuales específicas de cada especie (Hedley, 2016).
La fisiología reproductiva de los reptiles es extremadamente compleja. El ciclo reproductivo está controlado por variables como las horas de luz, la temperatura, la humedad, el diseño del recinto y la dieta (Rivera, 2013). Los reptiles pueden ser ovíparos (lagartos, salamanquesas, tortugas y serpientes), vivíparos (eslizones) u ovovivíparos (boas y algunos camaleones) (Elliott, 2014). La partenogénesis, o reproducción asexual, también se ha descrito en unas 30 especies de lagartos (Mader, 2006).
¿Tienen órganos reproductores los reptiles?
Ambos sexos en los reptiles tienen estructuras sexuales especiales que ayudan a la fecundación. Existen dos testículos en los machos y dos ovarios en las hembras, ambos situados dorsomedialmente en la cavidad abdominal. Las hembras también poseen un oviducto derecho e izquierdo sin útero propiamente dicho.
¿Cómo se reproducen los reptiles asexualmente?
Una forma de reproducción asexual llamada partenogénesis se da en varias especies de salamanquesas y otros lagartos. La partenogénesis es una forma de reproducción asexual de las hembras en la que el óvulo crece y se convierte en embrión sin que los machos lo fecunden.
Desarrollo en reptiles
Los reptiles tienen estrategias reproductivas variadas y complejas y, en cautividad, pueden desarrollar una serie de problemas reproductivos que incluyen diferentes tipos de distocias y prolapsos de cloaca, hemipenes y oviducto. El veterinario debe conocer la biología reproductiva de las especies de reptiles más comunes para poder predecir posibles problemas, asesorar a los clientes sobre las medidas que deben tomar para evitar complicaciones relacionadas con la reproducción y diagnosticar y tratar eficazmente las distocias y los prolapsos.
El término "grávido" se utiliza en lugar de "preñado" cuando el animal está poniendo huevos. El tamaño de la nidada varía mucho de una especie a otra, y se establece un equilibrio entre el tamaño y la madurez del feto y el número de crías.
Se sabe que en los reptiles se da la partenogénesis, en la que una hembra no apareada produce crías viables. Las hembras también pueden almacenar esperma de una temporada a otra y, por tanto, no tienen que aparearse necesariamente antes de cada puesta para producir crías.
La mayoría de los reptiles tienen una época de cría distinta, que se desencadena por estímulos ambientales como la hibernación, la duración del día, la humedad, la presión barométrica, la disponibilidad de lugares adecuados para anidar, etc. La falta de estímulos ambientales correctos es una de las razones de la distocia en las hembras de reptiles, cuando se inicia el desarrollo de las crías pero se detiene de forma inadecuada en algún momento del ciclo. Los reptiles hembra también necesitan estar en un buen plano nutricional con reservas suficientes de energía y calcio para producir crías viables. Los niveles de calcio en sangre aumentan drásticamente durante la formación de las yemas.1
Aparato reproductor de los mamíferos
El aparato reproductor es un sistema de órganos dentro de un organismo que trabajan conjuntamente con el propósito de la reproducción. Muchas sustancias no vivas, como fluidos, hormonas y feromonas, también son accesorios importantes del sistema reproductor[1] A diferencia de la mayoría de los sistemas de órganos, los sexos de las especies diferenciadas suelen presentar diferencias significativas. Estas diferencias permiten la combinación de material genético entre dos individuos, lo que permite la posibilidad de una mayor aptitud genética de la descendencia[2].
Los principales órganos del aparato reproductor humano son los genitales externos (pene y vulva), así como una serie de órganos internos entre los que se encuentran las gónadas productoras de gametos (testículos y ovarios). Las enfermedades del aparato reproductor humano son muy comunes y están muy extendidas, sobre todo las enfermedades de transmisión sexual[3].
La mayoría de los demás animales vertebrados tienen sistemas reproductores generalmente similares que constan de gónadas, conductos y orificios. Sin embargo, existe una gran diversidad de adaptaciones físicas así como de estrategias reproductivas en cada grupo de vertebrados.
Esquema del aparato reproductor de los reptiles
Los reptiles son criaturas fascinantes. Pueden ser desde diminutos e inofensivos hasta enormes y terroríficos, con una gran variedad de formas y colores. Los reptiles también tienen muchas estrategias reproductivas diferentes que evolucionaron a lo largo de millones de años para ayudarles a sobrevivir en entornos difíciles. Además, los reptiles tienen diversos métodos de reproducción. Los reptiles ponen huevos, tienen nacimientos vivos y pueden reproducirse asexualmente. Algunas especies de lagartos ponen huevos en agujeros que excavan en el suelo. Las tortugas ponen sus huevos en tierra, a menudo en zonas arenosas cercanas al agua para que las crías puedan llegar fácilmente al agua cuando nazcan.
Los reptiles suelen ser de sangre fría y se reproducen sexualmente por fecundación interna. Los reptiles ponen huevos, pero algunas especies también dan a luz. La puesta de huevos de los reptiles no es necesariamente aleatoria; la mayoría de los lagartos ponen huevos en nidos hechos por la hembra. La hembra puede incluso proteger los huevos de los depredadores en su boca hasta que eclosionan. A diferencia de los mamíferos, cuyas crías se desarrollan dentro del cuerpo de la madre y se alimentan de su leche tras el nacimiento, los reptiles no tienen glándulas mamarias, por lo que todas las crías nacen sin apego a su madre.