Aparato digestivo de los reptiles
Aparato digestivo de los mamíferos
En su forma más simple, el aparato digestivo es un tubo que va de la boca al ano. Su principal objetivo es descomponer las grandes macromoléculas (proteínas, grasas y almidón), que no pueden absorberse intactas, en moléculas más pequeñas (aminoácidos, ácidos grasos y glucosa) que pueden absorberse a través de la pared del tubo y pasar al sistema circulatorio para su difusión por todo el cuerpo.
Las regiones del aparato digestivo pueden dividirse en dos partes principales: el tubo digestivo y los órganos accesorios. El tubo digestivo está compuesto por la boca, la faringe, el esófago, el estómago, los intestinos delgado y grueso, el recto y el ano. Asociados al tubo digestivo se encuentran los siguientes órganos accesorios: glándulas salivales, hígado, vesícula biliar y páncreas.
Sistema digestivo de los reptiles slideshare
Resumen Como ectotermos, los anfibios y reptiles no tienen que soportar el gasto metabólico de la endotermia y se caracterizan por bajas tasas de flujo de energía y altas eficiencias de conversión de biomasa, en relación con las aves y los mamíferos (Pough 1983). Los bajos requerimientos energéticos de anfibios y reptiles tienen importantes ramificaciones en el proceso digestivo y, en especies herbívoras, en el nivel de energía que debe ser generado por fermentaciones en el tracto gastrointestinal.Palabras claveEstas palabras clave fueron añadidas por máquina y no por los autores. Este proceso es experimental y las palabras clave pueden actualizarse a medida que mejore el algoritmo de aprendizaje.
Sistema respiratorio de los reptiles
Los dientes de los lagartos sirven para agarrar, perforar y romper los alimentos o, en el caso de los monitores, rebanar y cortar. Los lagartos caimán (Dracaena guianensis), que se alimentan de moluscos, y los monitores del Nilo (Varanus niloticus) adultos tienen dientes anchos y redondeados en las mejillas para triturar las conchas.
Los dientes suelen ser pleurodontos (pegados a los lados de la mandíbula, sin cavidades), pero en algunas familias, como los agámidos (Agamidae) y los camaleones (Chamaeleonidae), son acrodontos (pegados a los bordes de mordida de las mandíbulas, sin cavidades). Los dientes del venenoso monstruo de Gila y del lagarto mexicano de cuentas están estriados para permitir el flujo del veneno; sin embargo, no tienen conexión directa con las glándulas sublinguales del veneno. El veneno se inyecta con la acción de masticar mientras fluye a lo largo de los surcos dentales.
Los dientes pleurodontes se desprenden y se reemplazan, mientras que los acrodontales sólo se reemplazan en ejemplares muy jóvenes. En el caso de los agámidos y camaleones, se debe tener especial cuidado para evitar dañar los dientes acrodonto al abrir la boca de un lagarto con un espéculo rígido, ya que estos dientes son insustituibles. Además, la dentición acrodontal es susceptible a las enfermedades periodontales.
Aparato digestivo de las aves
IntroducciónLos dragones barbudos de tierra adentro (Pogona vitticeps) son animales de compañía muy populares que se presentan habitualmente a los veterinarios para recibir atención médica y quirúrgica [1, 2]. Debido al temperamento estoico de estos animales, la detección precoz de enfermedades puede resultar difícil. Por este motivo, es importante seleccionar los diagnósticos adecuados, como las técnicas de imagen, para investigar el estado de estos animales. Lamentablemente, existe una falta general de conocimientos basados en pruebas sobre la anatomía y fisiología básicas de esta especie, lo que puede dificultar a los veterinarios la interpretación de las pruebas diagnósticas. Esto es especialmente cierto en el caso del sistema gastrointestinal de los dragones barbudos, ya que hay numerosas enfermedades que pueden afectar al canal alimentario de los dragones barbudos cautivos [3, 4]. Debido a estos retos, es importante que los veterinarios desarrollen criterios basados en pruebas para evaluar e interpretar el estado de salud de los dragones barbudos.
Los objetivos de este estudio eran obtener datos anatómicos de referencia del canal alimentario del dragón barbudo y comparar dos medios de contraste orales, el sulfato de bario y el SMAT, en cuanto a la facilidad de administración, el tiempo de tránsito y la calidad de la imagen. Las hipótesis específicas puestas a prueba eran que 1) tanto el bario como el SMAT resaltarán el canal alimentario del dragón barbudo, y que 2) el SMAT será el contraste preferido debido al tiempo de tránsito y la calidad de la imagen.